Alguien dijo alguna vez que la realidad supera muchas veces a la ficción. Pues eso es lo que nos está pasando ahora. O si no, que se lo pregunten a ese español de cada cinco que, según el INE, vive por debajo del umbral de la pobreza. UNO DE CADA CINCO!!. Se dice pronto y además, estamos acostumbrados a decirlo de carrerilla, como si no pasara nada. Pero mañana nos podría tocar a nosotros, y entonces seguro que la cosa cambiaría.Que le pregunten a ese español de cada cinco, que todos los días tiene que hacer malabarismos con el poco dinero que tiene para sus más básicos gastos, qué le parece la medida del incremento del IVA. Seguro que le agrada que sus dirigentes, esas personas encargadas de velar por el bienestar de su país y por ende de la salud económica y social de sus conciudadanos, hayan decidido que lo mejor para ellos (y para el resto), sea que la barra de pan cueste un % más, la luz, el agua, la alimentación, la ropa, vea incrementado su precio final por el incremento del IVA. Estoy convencido de que lo entenderán y en agradecimiento tengan un recuerdo cordial y diario hacia sus personas y familiares.
Pero bueno, como escuché el otro día por ahí, probablemente todo vaya encaminado hacia otros derroteros, y para llegar a conseguir los fines propuestos, la situación del ciudadano de a pie tiene, a priori, más bien poca importancia. Es evidente que las ventas de automóviles se han disparado desde que se ha dado a conocer la noticia del incremento del IVA. De igual manera, se relanzarán en breve las ventas en otros sectores; inmobiliario, hogar, ocio... para que el ciudadano de a pie se ahorre ese porcentaje de subida que más tarde no podrá evitar. Un espejismo en el medio de un desierto. A qué es debido?. Parece ser que una de las finalidades de nuestro señor Presidente del Gobierno es afianzarse en las cercanas elecciones catalanas, donde se encuentra ahora mismo en la cuerda floja. Con esta jugada, en principio molesta para la mayoría, conseguirían un aumento positivo y a corto plazo en las estadísticas de consumo que son, en condiciones normales, síntoma inequívoco de repunte y salida de una crisis.
Me imagino lo que ocurrirá cuando lleguen las próximas elecciones catalanas y salgan nuestros actuales gobernantes, esos malos actores de las películas de ciencia ficción, en esos multitudinarios mítines diciendo Ya hemos salido de la crisis!!! Observad como se ha incrementado el Índice de Consumo!!! y sandeces por el estilo. Pero seguro que conseguirán su propósito, porque los españoles somos la excepción que confirma la regla y somos los únicos que tropezamos mil veces con la misma piedra.
Qué ocurrirá después?. Nadie lo sabe. Porque todo lo que sube, tarde o temprano, baja. Y en este caso el boom consumista se producirá durante unos meses, antes de la entrada del IVA. Posteriormente las aguas volverán a la normalidad y los índices, entonces, probablemente bajen bastante.
Pero... Tenemos las encuestas!!!!!!. Eso es oro para un político. Y las usarán quién sabe cuanto tiempo después. O no os acordáis cuando toda Europa estaba inmersa en la crisis y decía el ilustre Zapatero que nosotros No, que España era imposible que entrara con el potencial que tenía. Mirad las encuestas decía, mirad los números.... Paparruchas.
Esta secuela de la película en la que todos somos protagonistas (aunque de nuevo con un mal director), se está haciendo ya un poquito larga y pesada. Yo, paticularmente, estoy deseando que llegue el final. Y para demostraros que los dichos populares casi siempre tienen razón, quiero terminar con uno cortito que dice que SEGUNDAS PARTES NUNCA FUERON BUENAS.
A los hechos me remito.









